Aquí nos encontramos una semana
después y relatar mis experiencias que han ocurrido a lo largo de estos
días. He estado durante cinco días con Eva, la enfermera pediátrica, asique a
disfrutar de los niños y sus maravillosos “llantos”.
Para resumir los dos primeros
días, tan solo me hace falta decir que han sido una toma de contacto, una
preparación para los siguientes días. También ha sido un potenciador de mi
comunicación, ya que tenía que hablar con los padres (normalmente la madre) y
explicarles lo que íbamos a realizar.
El tercer día ha sido muy
gratificante, Eva me ha dejado manejar la consulta. Asique cada revisión la
hacía yo, unas veces mejor y otras no tanto, para que mentir, ya que se me
quedaba alguna pregunta por hacer. Eso sí, de las vacunas se ha encargado ella,
menos a un chico de 14 años al cual me ha dejado vacunar. Lo mejor de todo, a
sido el comentario de ella, que me ha dicho: “Si no te viera suelto, no te
dejaría hacer estas cosas”.
Asique por ahora, mi autoestima,
mi confianza en mi mismo, y mi comunicación están mejorando, y tenemos que
sumarle que después de semana y media sacando sangre, cada día hay mas practica.
Mi frase que me repito internamente, ha seguir con este ritmo y a dar lo mejor
de mi.
Después de 4 días, allí estaba
yo, llamando a los usuarios. Había unos pasos que no variaban en todas las
consultas, por un lado se media, se pesaba, se preguntaba por la alimentación
(importantísima la leche), las deposiciones, si miccionaba correctamente, el
descanso y el desarrollo psicomotor. Teniendo en cuenta todo estos, pues la
consulta variaba en función de la edad, cuanto mas pequeño mas se importancia
tenia el peso y la alimentación (leche), y cuanto mas grande la alimentación
(importante que fuera variada) y también que estuvieran vacunados.
Tras la revisión siempre viene la
pediatra, los examina, mientras Eva y yo pasamos todo al ordenador, y acto
seguido, pasamos si ella dice que todo esta correcto, a vacunarlos. Ya se me
todas las vacunas desde recién nacidos hasta los 14 años, ya que cada vez que
toda vacunar, la enfermera me pregunta que cual toca.
Hoy nada mas llegar a casa, he
cogido el teléfono, y he llamado a mi hermano pequeño que todavía tiene 12
años, y le he hecho una buena revisión, aunque haya sido telefónicamente. En
cuanto vaya a alicante vamos a tener que repasar algunos aspectos que no me han
terminado de gustar mucho, sobretodo en la alimentación.
Hoy es mi último día en
pediatría, y la tristeza es importante, ya que creo que esta semana me esta
ayudando bastante, soy un chico que sin tener confianza me cuesta entablar una
conversación, por lo que me ha venido bien preguntar a cada usuario lo
correspondiente, porque con los días lo iba haciendo mejor.
Aun así, me he levantado y fuera
las tristeza, a disfrutar del últimos día, y que buen día, la mañana como todas
ha empezado con extracciones de sangre, y hoy parecía que todos venían con
buena venas, y después a las 9 a pasar consulta con mi enfermera.
Eva me ha dejado vacunar a un
bebé de 4 meses, fijaros si estaba nervioso que ni tan siquiera me he dado
cuenta de los llantos del niño. Por lo demás la mañana ha pasado correctamente,
y resaltar que Eva me ha dicho que el lunes a primera hora de la mañana me
necesita, por que tiene la agenda muy ocupada, y como estoy suelto, que la
ayude y después ya entrará mi compañero David, a esperar que pase una semana
tan buena como la mía.
Ahora analicemos los puntos más
fuertes y los puntos que tenemos que mejorar. Como ya he dicho esta semana a sido gratificante, porque creo que
me mejorado mi comunicación y mi independencia, también el trato con niños/as
(con los mas pequeños hay que saber que van a llorar y no asustarse por eso,
dentro de un límite; y con los mas mayores son edades complicadas y normalmente
algunos vienen asustados por el tema de las vacunas).También que me han tratado
estupendamente la enfermera y las pediatras, y creo que les he dado lo máximo
de mi, aunque siempre se puede mejorar, pero darles las gracias por todo lo que
me han enseñado.
Como aspectos a mejorar, haber si
la próxima semana llego preparado al servicio que me toque y si me toca curas,
pues repasar en casa todos los apuntes y llegar con todo “fresco” sobre como
realizarlas.
Después de repasar todo lo que he
puesto en esta semana en el blog, me ha venido a la mente los días en que era
yo ese pequeño niño que acudía al centro de salud a que me hiciesen la
revisión, aunque no me acuerdo de mucho, lo que si que tengo claro ahora es que
por muy pesados que se pongan, siempre hay que darles un trato especial, ya que
esas edades son difíciles y encima si digamos tu eres el protagonista, con
todas las preguntas y controles.
Durante esta semana también me ha
surgido dudas, a cerca de la gran importancia que tiene la leche, hasta los 21
años mínimo tienes que tomarla medio litro diarios, y yo con esa edad no bebo
ni un solo vaso, lo complemento con queso y ese sería mu único lácteo. También
la importancia de la variedad en la dieta, y ese si que lo cumplo, pero con 21
años, cuando eran mas joven entendía la importancia de porque era. Esta semana
me tocará resolver todas las dudas.